Hoy martes es un día clave en el juicio por la muerte de cinco bebés en el Hospital Neonatal de Córdoba, con el intento de asesinato de otros ocho. El motivo, declara la principal acusada del caso: la enfermera Brenda Agüero. Por eso, antes de responder preguntas ante los jueces del tribunal y el jurado popular que van a definir su futuro, su abogado defensor habló y aseguró que las pruebas son “sólo indicios” y anticipó que la mujer “será sobreseída en unos meses”.
“Primero, Brenda es inocente ontológicamente porque lo dice la Constitución y todos los tratados internacionales, igual que todos los habitantes de este país. Segundo, es verdaderamente inocente. Y tercero, toda la prueba de cargo ha sido solamente prueba indiciaria”, afirmó el letrado Gustavo Nievas, en diálogo con Radio Rivadavia.
En ese sentido, el letrado dijo que la instrucción del expediente, a cargo del fiscal Raúl Garzón, no se llevó a cabo de manera correcta y se perdió la posibilidad de llegar a la verdad.
“La prueba que se podría haber recabado para llegar a la verdad, ya no se va a poder recabar de alguna manera. Se tapó el caso con una persona detenida que no tiene nada que ver. Dentro de un par de meses Brenda va a salir sobreseída porque no hay prueba directa ni indirecta en contra de ella y solamente indicios y un montón de pruebas inventadas”, agregó.
La mujer está acusada de intoxicar con potasio a los recién nacidos. Según la acusación, lo hizo para sobresalir en su trabajo por encima de sus compañeros.
“No hay una prueba directa, no hay una prueba indirecta, no hay un testimonio, no hay secuestro, no hay secuestro de jeringa en su poder. Hemos acreditado que nuestra hipótesis es que hubo una asepsia generalizada porque el hospital neonatal y específicamente el centro obstétrico era una mugre”, dijo Nievas.
El abogado descartó que haya un asesino serial que se cobró la vida de los recién nacidos. Es que, para el letrado, no sólo Agüero es inocente, sino también los otros diez imputados en la causa. Al respecto, Nievas apuntó a que se trata de un caso con tintes políticos y que su clienta es apenas un chivo expiatorio.
“Descartamos absolutamente la existencia de un asesino o una asesina serial. Lo único del asesino serial era la versión justa que encajaba el gobierno en una para evitar todo tipo de responsabilidad en el marco de un año electoral como fue el 2022″, acusó.
La teoría de los fiscales de juicio, Sergio Ruiz Moreno y Mercedes Ballestrini, sostiene que la presunta asesina les inyectó insulina y potasio a 13 bebés. A los únicos dos que les practicaron autopsia les encontraron altos niveles de ambas sustancias, con aplicaciones exógenas e inoculaciones erráticas, según consta en la investigación que tuvo a cargo el fiscal Raúl Garzón.
La pesquisa, además, descartó que haya sido un accidente. Es una hipótesis a considerar si se tiene en cuenta que el potasio tiene el símbolo K en la tabla periódica y suele confundir a los pacientes.
“Científicamente, es imposible que un bebé de tres kilos reciba la más mínima dosis de potasio y sobreviva. Eso es una mentira absoluta que científicamente se va a comprobar. Yo le aplico una pequeña dosis a un bebé de tres kilos y muere de manera inmediata y muere en mis brazos. Eso de que si no se lo colocó en vena, se lo colocó en la nalguita y puede sobrevivir 15 horas mientras y yo me voy a mi casa también es una mentira”, sostuvo al respecto.
Nievas negó que la enfermera haya inyectado Potasio en los menores y que la contaminación por este elemento no se da únicamente a través de una aguja. Si en el ambiente hay contaminación de este elemento -continuó- es probable que una persona tenga presencia de potasio en el cuerpo.
“Lo que ha pasado acá es una asepsia generalizada que los médicos no supieron manejar. Y cuando se le completó el cuadro se empezaron a complicar solos con la hipótesis de inventar algo que permitiera hacer zafar al gobierno de su responsabilidad en un hospital público. Entonces, la única brillante idea que se le ocurrió es la idea de una asesina serial”, añadió.