LA PLATA.- En un durísimo contrapunto con Javier Milei que se extendió a lo largo de todo su discurso ante la Asamblea Legislativa bonaerense, el gobernador Axel Kicillof calificó la política del Presidente como “criminal”, “delirante” y “terraplanista”, entre otros adjetivos que le colgó al libertario, a quien buscó parar como su antónimo y rival para los próximos cuatro años. “El Presidente no quiere achicar el Estado sino desintegrarlo”, denunció. Las últimas palabras de su discurso apuntaron a poner reparos a la convocatoria al “Pacto de Mayo” que Milei lanzó el viernes ante el Congreso de la Nación. “Se parece más a una amenaza”, afirmó Kicillof, para agregar: “Nuestro pacto es con el pueblo, con la Patria y la Provincia.” Luego a señalar que está dispuesto a discutir políticas, advirtió: “Estaremos para reclamar la inmediata reposición de fondos a las provincias. Si es para la foto, arranquen nomás si no llegamos”.
Kicillof estructuró todo su discurso en oposición al Jefe de Estado nacional, en un acto en el que lo acompañaron el presidente del PJ bonaerense, Máximo Kirchner; los secretarios generales de la CTG, Pablo Moyano, Carlos Acuña y Héctor Daer; el líder de la Federación Nacional de Camioneros, Hugo Moyano; el referente de la CTA, Hugo Yasky; una decena de intendentes oficialistas y representantes movimientos sociales. Una demostración de fuerza y un llamado de resistencia a Milei, que el bonaerense coronó con una convocatoria a los gobernadores, con él como ápice.
Kicillof dejó claro desde el inicio el tono político de su discurso: “Estamos pasando por una circunstancia incierta y sombría ante el extravagante experimento a la que está sometida la Argentina”, al que calificó como “un delirio centralista”. Su diatriba contra Milei recién empezaba. “Da vergüenza. ¿No se da cuenta de que se le ríen en la cara?”, se preguntó.
Lo aplaudieron los intendentes a coro. Se destacaron, entre otros, Andrés Watson (Florencio Varela), Mariel Fernández (Moreno), Mario Secco (Ensenada), Gustavo Barrera (Villa Gesell), Fabián Cagliardi (Berisso), Marisa Fassi (Cañuelas), Carlos Ferraris (Leandro Alem), Gastón Granados (Ezeiza), Federico Otermín (Lomas de Zamora), Fernando Espinoza (La Matanza) y Mariano Cascallares (Almirante Brwon).
Lo escucharon también referentes sociales y religiosos como el Arzobispo de La Plata. Gabriel Mestre; la titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto; la referente de Madres de Plaza de Mayo Herenia Sánchez Viamonte y Giselle Fernández, hermana de la expresidenta Cristina Kirchner.
Lo acompañaron al gobernador sus hijos y su mujer, Soledad Quereilhac; su vicegobernadora Verónica Magario, el presidente de la Cámara de Diputados, Alejandro Dichiara, diputados nacionales y su gabinete de ministros completo.
“Hoy más que nunca me comprometo a seguir gobernando en defensa de los derechos de nuestros pueblo y en defensa irrestricta de los intereses de nuestra provincia”, dijo el mandatario, tras denunciar que el gobierno nacional paró 900 obras públicas en este territorio. Afirmó que el gobierno provincial intentará sostener esas obras y viviendas paralizadas.
“No hay que experimentar con recetas anacrónicas, esotéricas o fracasadas. Los problemas no se resuelven con motosierra, con dinamita ni con ajuste”, añadió.
Afuera del Palacio Legislativo lo aplaudieron militantes del Partido Comunista, de la CTA, del movimiento Octubres y militantes de la Corriente Federal de Trabajadores. Entre ellos asistió también la diputada nacional Natalia Zaracho, alineada con Juan Grabois.
Ante este auditorio -integrado también por la ministra de la Suprema Corte de Justicia, Hilda Kogan y el secretario de Enjuiciamiento de Magistrados de la provincia de Buenos Aires, Ulises Giménez- el gobernador inauguró la 152 Asamblea Legislativa de la provincia con un discurso en el que advirtió sobre las limitaciones para su segundo mandato: “El obstáculo principal son las políticas que lleva adelante el gobierno nacional”. Tras lo cual, afirmó: “El gobierno nacional debe respetar la voluntad de la mayoría de los bonaerenses. Debe respetar a quienes eligieron a todos sus representantes. Eso no está sucediendo. El Presidente no está respetando a la provincia de Buenos Aires. Ni a su pueblo”.
“El presidente deberá aprender a convivir con representantes. La democracia no se trata de aprietes, de extorsiones de fundir o agredir a quienes no están de acuerdo con sus proyectos”, agregó ante diputados y senadores opositores, a los que instó a apoyar el reclamo por más fondos presentado ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación.
Kicillof ya pidió una medida cautelar para que se regularicen los envíos del Fondo de Incentivo Docente (Fonid) y el Fondo de Fortalecimiento Fiscal hasta que se defina la disputa de fondo. Y espera un pronunciamiento de todas las fuerzas con representación provincial para dar una señal de unidad ante el reclamo.
Sólo por el Fondo de Fortalecimiento para la provincia de Buenos Aires, eliminado la semana pasada por decreto, la provincia reclama 40.000 millones de pesos de febrero. Pero el reclamo incluye además enero de 2024, más diciembre y noviembre de 2023. La suma total rondaría los 120.000 millones de pesos. Además reclama otros 15.000 millones de pesos por el Fondo de Incentivo Docente.
“No queremos más motosierra ni ajuste. Milei y sus funcionarios dicen que fueron votados para hacer este ajuste. Mienten”, enfatizó. Y calificó a las políticas nacionales como “despiadadas para la mayoría”.
El gobernador llamó a hacer “todos los esfuerzo posibles para enfrentar el ajuste y la motosierra” y definió como un “salvaje saqueo” a las políticas de Milei. “Es una masacre social”, subrayó.
En más de una oportunidad apuntó contra el discurso de Milei ante la Asamblea Legislativa: “Lo escuchábamos declamar el viernes, para regocijo de los trolls que poblaban de los balcones del Congreso, que se ajustó a la política. Como se ve, es puro verso. La motosierra se aplicó sobre los jubilados, los laburantes, los pueblos de las provincias, las asignaciones familiares, las universidades nacionales. Para ser justos y exhaustivos, no todos los renglones del gasto se redujeron, hubo una partida que creció fuerte: fue el pago de servicios de la deuda externa, que se incrementó un 139% en términos reales”, detalló el gobernador.
Kicillof se refirió al Pacto de Mayo convocado en la ciudad de Córdoba por el Jefe de Estado Nacional. “Después de someter al pueblo, a la democracia y al federalismo a una agresión tan inédita como salvaje, ahora se nos lanza una invitación que se parece más a una amenaza o una imposición que a un diálogo. Ofrece exactamente lo que dice rechazar como método de la política: aprueben las leyes y recibirán los recursos que ilegalmente se cortaron. Nuestra respuesta es muy clara: cuenten con nosotros para 30 reuniones de trabajo, para encuentros destinados a solucionar problemas, incluso para debatir. Pero si se trata de encuentros para fotos y marketing… arranquen nomás si no llegamos.”
Luego enumeró siete condiciones para ese encuentro: “La inmediata reactivación de las obras públicas frenadas caprichosamente que afectan la vida de los 135 municipios. El respeto al federalismo y la inmediata reposición de los fondos vengativamente birlados a las provincias. La devolución de los fondos del Fonid para los salarios docentes y los fondos para las universidades y el transporte. La urgente distribución de los recursos destinados a los comedores y los medicamentos que se interrumpieron de manera tan insensible como incomprensible. La derogación del DNU ilegal, anticonstitucional según todos los especialistas de todas las vertientes y que es el marco para el saqueo de recursos provinciales que se viene realizando. El firme rechazo al delirante proyecto de dolarización, que debilitaría la soberanía monetaria, multiplicaría la desigualdad y que favorece únicamente al narcotráfico. El dragado del Canal Magdalena y la defensa irrestricta de nuestra patria y nuestra historia, con el firme reclamo por la soberanía en Malvinas”.
“Nuestro pacto es con el Pueblo, nuestro pacto es con la Patria y nunca lo vamos a traicionar”, declaró.
Desde el bloque de senadores de la UCR y Pacto Federal, Agustín Maspoli se refirió a la convocatoria al Pacto de Mayo por parte del presidente, Javier Milei: “El diálogo siempre es bueno, nuestro partido lo viene reclamando desde el inicio de la gestión del gobierno nacional. Pero el diálogo no puede tener condicionamientos ni ser a libro cerrado. Además para mayo falta mucho”.
Maspoli destacó: “Si a la mayoría de los argentinos el sueldo se les termina el 15 de cada mes. Hay que entender que las soluciones tienen que venir ahora. No se le puede pedir paciencia a quienes ya no pueden esperar más”, remarcó Maspoli y concluyó: “Hay que dar soluciones a los sectores más vulnerables que son los que peor la están pasando”
Desde la Libertad Avanza, Nahuel Sotelo dijo: “La verdad que el gobernador habló más de Milei que de lo que pasa en la provincia. Un discurso delirante, donde el gobernador dejó en claro que su discurso es de enojo pero de enojo con el mismo. Porque no supo administrar la obscena cantidad de dinero que le giro el gobierno de Alberto Fernández. De hecho, es un discurso muy perverso para los bonaerenses yo me pregunto. ¿Cómo no iban a empeorar los indicadores que dice el gobernador? Si los últimos 3 meses del año pasado se dedico a gastar en pan y circo. No en lo importante porque lo importante era urgente pero antipático para el electorado. Kicillof es ese adolescente que se quiere quedar en la casa de los padres, pidiéndole plata para los cigarrillos, la cerveza y la fiesta. Pero ya le dijeron que tiene que salir a trabajar y valerse por sí mismo. La plata discrecional de papá Alberto Fernández se terminó”.
Mientras las repercusiones por el discurso continuaban Kicillof partió raudo para participar de la cena de ExpoAgro en San Nicolás.
LA NACION