Convencido de que el presidente Javier Milei se fue “de vacaciones” cuando partió para su gira internacional por Israel, el Vaticano e Italia, el líder camionero Pablo Moyano criticó este jueves el rol del mandatario -al que tildó de “el anticristo”- y sobre todo marcó que en su encuentro con el papa Francisco el libertario se mostró “arrastrado”. Además, se lo vio descreído de los abrazos y las arengas que recibió por parte de los pasajeros en el avión comercial de Ita en el que volvió al país. “Que se suba a un tren a ver si lo aplauden”, lo desafió el hijo de Hugo Moyano, quien adelantó que los sindicatos “van a salir a la calle” si se mantienen estas políticas y aventuró que la conflictividad social irá en aumento.
Entre quejas porque, según su visión, el ajuste que impulsa la gestión mileísta lo paga el “laburante”, Moyano dijo que hay que ser “maldito y despreciar al hombre de trabajo” para hacer una cosa así. “No creo que si sube a un colectivo [a Milei] lo aplaudan como lo aplaudieron en un avión, ahí te das cuenta que siempre gobiernan para ese sector que sale enriquecido, que sigue ganando. Son los empresarios o la clase alta. Que se suba a un subte, a un tren, a ver si lo aplauden como arriba de un avión. Te das cuenta para quiénes gobierna: para el campo, los empresarios, las grandes corporaciones; y no para el pueblo argentino”, apuntó Moyano.
Seguro de que “la casta” sigue en el Gobierno, incluyó en ese grupo al titular del bloque Pro en la Cámara baja, Cristian Ritondo; al diputado Diego Santilli; al asesor Federico Sturzenegger; a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich; y al expresidente Mauricio Macri. “Lamentablemente se comieron el verso aquellos que con bronca contra nuestro gobierno votaron a este personaje que está haciendo lo posible para castigar a los más humildes”, comentó en El Destape Radio el sindicalista y fue ahí cuando arremetió contra el encuentro de Milei con el Sumo Pontífice, el lunes pasado: “El papel lamentable que hizo con el Papa… Creo que a todos nos dio una sensación de decir: ‘¿Cómo este tipo hace seis meses lo insultaba y después, arrastrado, el otro día, pidiendo disculpas”.
Con eso Moyano hizo referencia a los agravios que el actual presidente le había girado al Santo Padre durante la campaña, algo que quedó atrás después del llamado que ambos tuvieron cuando el libertario ganó y se comunicaron por teléfono, y más que nada tras el mitin de esta semana. “Creo que con el discurso que dio [Milei] en Davos, perdiendo políticamente cuando lloraba en el Muro de los Lamentos y perdía políticamente en el Congreso… Creo que somos un poco el hazme reír del mundo”, sentenció.
Luego de que anoche en LN+ el Presidente dijera que “la motosierra y la licuadora no se negocian”, en relación con su estrategia de ajuste del gasto para intentar bajar la inflación, Moyano siguió con sus dardos al mandatario. “Ya no le entendés nada, ¿qué es licuadora? Creo que no tiene plan, ni licuadora, ni motosierra. Se creó un monstruo mediático que está todavía gozando de sus dos o tres meses de luna de miel, como se merece cada gobierno, pero a este cada vez le van quedando menos cartuchos. Porque con estas medidas la gente la está pasado mal y vamos a salir a la calle a defender el laburo, la comida, la dignidad, los jubilados. Se va a ir licuando en su licuadora el poder transitorio que tiene”, advirtió.
Dijo, incluso, que el Presidente no cuenta con apoyo en el Congreso y tampoco para llevar adelante un cambio de políticas en el mundo laboral. “Se va a ir licuando de a poco, insistió y adelantó: “La CGT está facultada para tomar las medidas que sean necesarias: movilización, paro. No va a faltar mucho para que se vuelva a movilizar y se apliquen otras medidas en caso de que se siga atacando a los trabajadores”.
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