La oleaginosa tuvo una merma de casi 2% en el plano doméstico y externo. Medida en dólares, la cotización se encuentra en mínimos de 27 meses.
Arrastrado por la tendencia negativa en Chicago, que perforó el piso de los últimos 2 años, el precio local de la soja cerró este viernes en $265.000 por tonelada en el segmento disponible y tuvo una pérdida semanal de $5000 (1,85%).
“La plaza local exhibió un acotado nivel de actividad, con ofertas de compras que se mantuvieron estables para la soja disponible. Por mercadería puesta en las terminales del Up-River, se repitieron los $265.000 por tonelada, mientras que por coberturas puntuales se podían conseguir de $267.000 a $270.000, frente a los $274.000 del viernes pasado”, detalló el responsable de Research de la corredora Zeni, Eugenio Irazuegui, sobre lo ocurrido durante esta jornada.
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En el Matba Rofex, los contratos inmediatos repuntaron a $270.000 por tonelada. En cuanto a las posiciones a cosecha, los futuros a mayo de 2024 retrocedieron a US$288,20 por tonelada.
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Sigue la tendencia bajista de la soja en Chicago
En Chicago, la soja perdió US$5,60 y cotizó a US$436,70 por tonelada en el contrato con entrega a marzo. Respecto al viernes previo, la oleaginosa se retrotrajo US$7,63. Es decir un 1,72%.
“Extendiendo la conducta bajista de la jornada precedente, el mercado de soja volvió a posicionarse en la zona de mínimos de 27 meses. La recolección se está tornando fluida en territorio brasileño y la reposición de humedad favorece el desarrollo de los cultivos que aún están transitando las etapas reproductivas”, comentó el analista.
Casi una quinta parte del área cultivada en Mato Grosso ha sido cosechada, mientras que el paso fue acelerándose en Paraná, que ha completado el 12% de las hectáreas sembradas en el estado.
Un poco más de lejos le siguen los estados de San Pablo, Minas Gerais y Goiás, cuyos progresos oscilan entre el 5% a 9%.
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“Por otro lado, la prolongación de días secos y excesivamente cálidos en Argentina genera cierta cautela en cuanto a las estimaciones productivas. No obstante, los pronósticos meteorológicos reafirman que la oferta hídrica aparecería a mediados de la semana próxima, junto a un descenso moderado de las temperaturas”, resaltó.
Para el período delimitado entre el viernes 9 y el jueves 15 de febrero se prevén aportes generalizados, con mayor énfasis en sectores de Córdoba y este de San Luis. En este contexto, los precios concluyeron por debajo de los US$ 437 por tonelada.
Por otro lado, el maíz terminó la última rueda de la semana con una caída promedio de US$1,20 por tonelada.
Al margen de los motivos asociados a la conformación de la campaña sudamericana, desde el agregado agrícola del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) en China prevén una desaceleración de las importaciones. El organismo recortó en 2 millones de toneladas su previsión de compras en el exterior, que ahora las ubica en las 20 millones.
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“Si bien los orígenes estadounidenses han ganado competitividad frente a los exportadores restantes, la nación asiática ha seguido cerrando operaciones con Brasil. Esto da la pauta de que EE.UU. continuaría con abundantes stocks por un tiempo más”, comentó el analista.
Por último, se registraron “modestos avances” en los valores del trigo, que finalizaron en US$220,37.
“A pocos días de difundirse el recuento de existencias físicas en Canadá, se conocieron los sondeos previos a la publicación oficial. El promedio señala que, a finales de 2023, el cereal almacenado alcanzaría unas 20,70 millones de toneladas”, explicó Irazuegui.
De terminar corroborándose esta cifra, se trataría de una retracción del 10,7% en comparación a igual fecha del año anterior.
“Mientras tanto, las autoridades gubernamentales de Pakistán comunicaron la suspensión de importaciones, por parte de la agencia estatal, argumentando que el país cuenta con suficientes reservas y los precios domésticos de la harina mantienen una trayectoria estable”, concluyó Irazuegui.